Por José Gandour @gandour Fotografía Manuela Uribe 

Apenas el espectador ve sus primeras imágenes, comprende que ahí hay una sensibilidad particular. En tiempos en los cuales más de uno se confunde y alaba de manera exagerada lo que hace cualquiera con un celular de buen lente, el esfuerzo de los artistas fotográficos pierde por momentos el reconocimiento que merecen. En el caso de la colombiana Manuela Uribe, quien ejerce su labor de manera independiente entre Buenos Aires y Bogotá, sus fotos nos recuerdan la evidente diferencia que hay entre la percepción de una profesional en la búsqueda de un momento particular y  apretar el click en cualquier aparato portátil sin mayor perspectiva que tener suerte en la búsqueda de la belleza. Sus proyectos transitan entre las manifestaciones musicales, el retrato, lo documental y sus proyectos personales. En su portafolio podemos observar instantáneas captadas en conciertos y festivales internacionales, donde vemos tanto las explosiones de los personajes estelares en tarima así como la respuesta del público en dichas presentaciones. En sus mejores fotos cómo desfilan luminarias como los Arctic Monkeys, St. Vincent, Kali Uchis, Systema Solar y otros destacados nombres del medio internacional. Aprovechamos su presencia en la capital colombiana, para conversar sobre su trabajo.

¿Qué significa la fotografía para ti?
La fotografía se ha convertido en un vehículo para entender el mundo, también para entenderme. A través del lente descubro perspectivas, ángulos, me hago nuevas preguntas, entiendo mejor los silencios. Es como una forma de pensar en la que uso lugares del cuerpo y de la mente diferentes a los habituales. Entonces desde ahí todo se transforma y se vuelve infinito en la medida que se multiplican las posibilidades de lectura del mundo. También significa una gran compañía, un lugar “seguro” al cual puedo volver siempre que lo necesito. Mi habitación propia, como escribió alguna vez Virgina Wolf.

¿Cómo relacionas la fotografía con la música?
Es una relación muy personal, un espacio donde uno dos aspectos fundamentales de mi vida. Desde ahí me permito vivir lo musical desde una recreación que no tiene que ver solo con el acto de la escucha. Existe también una transformación, una re-creación que parte de lo musical y termina en algo visual, mediada por mi mirada y mi experiencia en ese momento/lugar.  Creería que las relaciono desde un lugar muy íntimo y emocional. Mucho de mi trabajo fotográfico nace ahí.

¿Cómo te vinculaste como fotógrafa al mundillo musical?
Desde pequeña he estado rodeada de música y de músicos, creo que fue el resultado de un proceso muy orgánico. Entre amigos y canciones cercanas al corazón.

¿Cuál fue tu primer festival como fotógrafa?
Antes de los festivales hubo conciertos, creo que el primero fue el Music Wins en Buenos Aires

¿Qué imágenes buscas en un festival?
Yo no sé si voy buscando imágenes específicas, creo que es más sobre atmósferas. Me gusta encontrar algo de la intimidad del músico más que de lo espectacular. Aunque eso también se une en algunas situaciones. Y también es el estado emocional al que llego en esos momentos. A veces miro sin ver, no se si se entiende. No estoy midiendo tanto la foto como tal, estoy viviendo el momento.

¿Qué artistas te dieron las imágenes que más te complacieron tomar?
Creo que lo que más disfruto es compartir procesos. Participar en la grabación del último disco de Canalón de Timbiqui, De Mar y Río, fue una experiencia hermosa y profunda y de ahí salieron una serie de retrato que atesoro.  Hace unos meses hice también unas fotos para el nuevo disco de Minük, una experiencia muy especial! Y en vivo muchas bandas, muchos momentos. Cage the Elephant, LCD Soundsystem, Willie Colón, Oscar de León, Kali Uchis, Bomba Estéreo, Arctic Monkeys, Devendra Banhart, CocoRosie, Bonobo. Y Muchos artistas increíbles con shows increíbles!

 ¿Cómo afrontas los retratos? ¿Qué necesitas para hacerlos?
Me gusta poder conocer un poco a las personas que voy a retratar antes de hacerlo, hablar sobre la idea, compartir perspectivas.  Intento que sea cómodo y muy casual, dirijo por supuesto, pero intento no imponerme en la corporalidad del otro. Prefiero que sea una relación sin jerarquía

¿A quién te gustaría tomarle una foto?
Todo el mundo tiene algo interesante. Más que una lista de nombres es una forma de relacionarse.

 

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