montePor Rodrigo Ricardo @hhdrums

Monte: elevación natural de terreno. Tierra inculta cubierta de árboles o matas. Son las dos primeras definiciones que da el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española. Coincidencialmente es lo que viene a la mente de quien escucha el primer track, llamado La Luz, de El Otro Mundo, trabajo de esta banda de muchachos costarricenses. Sonidos orgánicos, armonía etérea, que hacen querer plantar los pies de vuelta en la Madre Tierra, pero que, a la vez, elevan el alma, como una especie de ritual chamánico que busca introducir al espectador en los secretos de las influencias que confluyen en lo que se viene en las próximas canciones.

Y me encuentro, precisamente, con una amalgama innumerable de tendencias sónicas en las demás canciones de esta producción que, si bien no resulta cómoda la primera vez que se tiene contacto con ella, resulta siendo una pieza musical exquisita por su fineza y su sencillez.

En El Descenso de los Voladores se puede percibir una melodía sencilla con una instrumentación algo punk-pop, algo indie, que termina teniendo un toque adolescente, fresco y un poco nostálgico.

Sigue Cuevas (Versión 1), la canción que más me llamó la atención del trabajo, a causa de una marcada influencia beatlesca, que se nota, más que todo, en la forma como es interpretada la batería, sin muchas ambiciones ni rimbombancias rítmicas, pero que encaja a la perfección con la simplicidad armónica de este himno a la desesperación. 5 estrellas de 5 para esta canción. Me absorbió por completo.

Hola resulta ser un track bastante particular. Una voz infantil, ecualizada de tal manera que suena un poco espeluznante, acompañada de sonidos sintetizados, en una composición algo monótona, pero que no aburre, como podría pensarse.

Finalmente, Patrulla Reina Para Siempre, para cerrar este buen trabajo: una balada que no tiene muchas pretensiones, más que fluir, llevando a quien escucha a un cierre relajado y natural.

Podría decirse que disfruté escuchando a este buen producto, pero mentiría. “Disfrutar” es un término que se queda corto ante la cantidad de emociones que se juntaron y que me envolvieron mientras salían todos estos sonidos de mis auriculares. Definitivamente, una experiencia que vale la pena tener y una muy buena banda a la que vale la pena seguir.

Compartir
HTML Snippets Powered By : XYZScripts.com