Por José Gandour @gandour
Arranquemos con un detalle curioso que la banda argentina Mateo de La Luna en Compañía Terrestrial nos advierte cuando exhibe los créditos de su último video, Iván. Para calmar las críticas moralistas que seguramente se vienen frente a ciertas escenas, aseguran a la audiencia que «ningún animal fue lastimado para hacer este video, y las drogas son falsas». Igual, en medio de planos llenos de cerveza, grafitti, humo y muchos bailes y cariños, vemos un pitbull que suponemos no fue torturado para que sonriera.
En fin, este clip parece la versión porteña de una tarde noche de postadolescentes disfrutando las horas sin mayor complicación, y con fascinante sonido acústico la letra dice, en medio del color de las imágenes, «si eso no es el amor, yo no entiendo nada». El mundo se puede estar derrumbando en cualquiera de sus esquinas, pero mientras haya amigos, buena bebida, algo para fumar y la posibilidad de besarse con cualquiera, no hay de qué preocuparse. Una canción contagiosa con un video que sabe repetir lo dicho en los textos de manera clara y concisa. Ahí donde lo ven, estamos frente a un perfecto himno de las nuevas generaciones. ¿Por qué no?.