Por equipo de Zonagirante.com @zonagirante
Ainda – El equilibrio
Ya muchos saben hacer videos de bajo presupuesto, pero tener claro es concepto y lograr plasmarlo con la magia suficiente para sorprender a la audiencia lo consiguen pocos. En este caso, esta joya audiovisual se recaba teniendo claro cada segundo de lo que ocurrirá frente al lente. Todo el clip es un plano secuencia cuya coreografía ha sido ensayada hasta tenerla sincronizada al dedillo, y, teniendo solo una habitación a disposición, el uso de las luces de colores previene cualquier distracción del espectador. Además, por supuesto, la canción tiene la vitalidad suficiente como para que quien elija ver esta pieza tenga el humor en alto y disfrute todo el contenido de principio a fin. Por último, el lipsync de los últimos instantes es un detalle para enamorar a los más quisquillosos. En fin, un gran trabajo.
Eli Almic – No era una pavada
Desde Uruguay nos llega una llamativa propuesta de hip hop, alimentada de jazz clásico, y teniendo presente una voz punzante que contiene la atención constante del espectador. La temática de la canción es referente a la depresión y el argumento del video intenta de manera efectiva representar la problemática narrada, consiguiendo representar el ambiente preciso para el correcto entendimiento del público expectante. La labor se ejecuta satisfactoriamente con una adecuada dirección de arte y un práctico despliegue fotográfico. El resultado de la colorimetría es un tanto oscuro, pero se adecúa perfectamente al sentimiento que transmite la canción.
Onyricats – Freak
Desde la ciudad mexicana de San Luis del Potosí nos llega esta divertida banda femenina, con un sonido que tiene reminiscencias al pop rock alternativo de los años noventa, de letras directas y sencillas y resonancia contundente. El video, que acude al conflicto recurrente de sentirse «la rara de la película» durante la adolescencia, tiene escenas de terror juvenil, aquelarres en el bosque, algo de la estética automotriz procedente de los tiempos del cassette y la gasolina barata, y una reivindicación final en la que se asegura que no acomodarse a los moldes de la estética física tradicional no tiene por qué ser perjudicial para la salud mental. Es un clip ecléctico pero efectivo en su mensaje y, sobre todo, ayuda de forma práctica la promoción de una buena tonada.