Por José Gandour @gandour
La labor de hacer del tango música para nuevas generaciones no ha sido facil. Muchos lo ven cómo un género demasiado nostálgico, atrapado en una época con otros modos sociales y, por qué no decirlo, de cierto modo misógino y violento. El desarrollo del tango ha traido consigo propuestas muy interesantes, pero no por ello los canales habituales de difusión musical se han sumado a difundir de la manera que se merece dicha evolución. Un buen ejemplo de ello es Yira.
Esta banda, que se define su estilo como «rock electroporteño», junta en sus canciones su lunfardo contemporáneo con muestras de los estilos ya citados y una suma adicional de hip hop y cumbia en algunas de sus composiciones. Lo suyo es un buen reflejo de un Buenos Aires del siglo 21, que no teme en reconocerse hija de inmigrantes de todas las razas y de todas las condiciones sociales. Eso se plasma inteligentemente en su álbum Santos Inocentes, presentado hace ya casi dos años. De este álbum aún siguen saliendo canciones promocionales y en este caso la banda presenta el video Adios, un clip ágil que presenta su poderío en vivo en edición particular, donde se simulan planos y escenas como si se tratara de cinco o seis cámaras simultaneas. Adios es una canción de buen humor, que cuenta realidades de los tiempos actuales, adecuada para una nueva audiencia que exige este lenguaje al tango del momento.
El tango, a traqves de Yira, se reinventa y busca nuevas atenciones alrededor del mundo. Sería bueno responder a su llamado y dejarse sorprender.