Por José Gandour @gandour
Un día, mi amigo Carlo Bruno Montalvao, dueño de la agencia brasileña Brain Productions Booking, me preguntó qué pensaba sobre una agrupación bogotana llamada Balthvs. No tenía ni idea de qué estaba hablando. Cuando me comenzó a comentar que el trío en mención era de lo mejor que había escuchado en años y que los quería para su compañía, debo confesar que me sentí demasiado ignorante, demasiado desconectado de lo que estaba sucediendo. Entonces llamé a un par de periodistas amigos de la escena capitalina colombiana y tampoco me supieron responder nada. Igual, estábamos en plena pandemia y la información apenas fluía de manera digital. Los busqué en las plataformas digitales y descubrí que era una banda de sonido cercano a momentos de la música de los años sesenta y setenta, elementos del soul y el blues de la época, pero, a su vez, enriquecidos con el sabor del funk y el disco de comienzos de los ochenta, y con momentos inesperados tomados de Medio Oriente, y otros de vertientes contemporáneas como son el trip hop y el house. Tonadas mayoritariamente instrumentales (aunque hay momentos vocales en inglés y español mezclados dentro del bloque, sin sobresaltos), tienen un sonido y, si se quiere, una actitud que no se observa fácilmente en el ambiente musical bogotano. Algunas de sus canciones podrían hacer parte de la banda sonora de cualquier película de acción afroamericana de las últimas décadas, y otras podrían servir como el inicio de una fiesta multicultural fascinante en cualquier parte del mundo. Lo suyo está bien hecho y va por buen camino, haciendo parte ya del boca en boca de los propagadores adecuados para difundir sus grabaciones por los distintos círculos de la industria del entretenimiento. Su recién publicado segundo álbum, Cause & Effect, será presentado en días en la próxima edición del festival SXSW, de Austin, Texas, y ya hemos sido advertidos de la atención que han despertado entre expertos que quieren ver sus actuaciones en dicho evento. Por ello hemos contactado antes de su viaje a Balthazar Aguirre, guitarrista y compositor, para poder conversar sobre su proyecto:
Comencemos por lo básico, ¿a qué suena Balthvs?
Balthvs suena a una ecléctica mezcla de funk psicodélico con influencias soul, house y músicas del mundo.
¿Cuáles son los orígenes de la banda?
A finales de 2019, después de la disolución de mi antigua banda de rock psicodelico, conozco a Johanna, conectamos inmediatamente, empezamos a vivir juntos y ella quiere aprender a tocar bajo. Considero que no solo le puedo enseñar, sino que podemos armar una banda, un formato minimalista, power trio… Así que llamó a mi antiguo colega baterista Santiago, con el que llevo años tocando, y empiezo a hacer temas acá en mi estudio de grabación. Para Marzo 2020 sacamos nuestro primer sencillo
¿Así que la cosa no sólo trae música, sino una historia de amor?
Son dos cosas aparte, y como cualquier relación es complicado, prefiero el enfoque en la música. No hay duda que la música esta impregnada de nuestra conexión. Los 3 tenemos mentes muy afines a la música y por eso conectamos fuerte.
¿Qué referencias musicales se pueden citar al hablar de influencias en la banda?
Yo fui fuertemente influenciado por la ola psicodélica de los 60’s, bandas como Grateful Dead, Santana, Quicksilver Messenger Service, fueron mi fundación musical por muchos años. Por mas estilos o géneros que exploremos, lo psicodélico siempre esta ahí de alguna manera… Pero aparte de esa esencia, estamos igual a gusto escuchando House, música tradicional de Turquia, Disco (Chic, Bee Gees), Funk (James Brown, Funkadelic), Neo Soul (Erykah Badu, D’Angelo) Indie (Mac deMarco Parcels) , rock psicodelico turco (Baris Manco, Erkin Koray) y afrobeat (Fela Kuti, Tony Allen)
Ustedes (sin ánimo de ofender, más bien todo lo contrario) lucen como los bichos raros de la escena musical bogotana. Lo digo porque pocos (o nadie) suena como ustedes en esta ciudad. ¿Cómo ven la escena que los rodea?
Consolidada en tribus o pequeñas escenas, esta el rap que es gigante, sobre todo en el sur de Bogotá, el metal en Suba, la escena indie triste de Chapinero, los jazzeros de la Javeriana, y pues los generos estandar que tienen sus parches (ska, metal, punk, reggae). La verdad somos muy ajenos a estas escenas por lo que mencionas y operamos totalmente por aparte. Nos tocará hacer nuestra propia escena, jajajaja…
Me llama la atención cómo han logrado llamar tan rápidamente la atención de profesionales internacionales que han puesto los ojos en ustedes. La primera vez que escuché hablar de Balthvs fue a través de un agente brasileño que los quería firmar…
Pues somos una banda digital… lanzamos primer sencillo y nos cae la pandemia… Es música 60% instrumental y lo que tiene letra suele ser en ingles, claramente nuestro público no iba a estar acá. Era cuestión de buscar las bandas y escenas en las que si encajamos, que suelen estar en Estados Unidos o en Europa, y mover la vuelta hacia esos lados. Siendo ‘nativos digitales’ es segunda naturaleza mandar decenas de mensajes diarios por redes sociales para que nos incluyan en playlists o escucharan nuestra música, algo que seguimos haciendo. Hablar bien el inglés también es un detalle importante: Mi mamá me crio en inglés para que fuera bilingüe (ella es de Bogotá) y creo que fue una buena decisión de su parte, jajaja. para mi es como el español, natural…
En pocos días se van a Texas, a SXSW, ¿qué expectativas tienen?
Tengo una sensación que nos vamos a sentir mas en casa allá que aca. Muchas de nuestras influencias son de allá y pues para ellos es prácticamente el folclor local. Hay 2000 bandas y también hay una zona de cine y charlas, todo es posible en SXSW, lo que fluya. Acá estamos ensayando a diario, se siente un poco como los Olimpicos, miles de bandas de todo el mundo, que lo dan todo en ese lugar por 40 minutos para ver si se distinguen entre los otros miles….Siendo los únicos que van a ir de Colombia, es un honor estar un poco como embajadores de nuestro país para esta edición. Hay otro acto colombiano que se llama Salt Cathedral pero ellos viven hace mas de una década en Nueva York.
Tarde o temprano ustedes tendrán una sede en un lugar distinto a Bogotá, ¿verdad?
No, una cosa es el gusto de ir a esos lugares a trabajar y que lo escuchen pero vivir, no sé…. Nosotros recibimos regalías de Spotify y ventas digitales y físicas en Bandcamp. Con el Peso como está es un buen salario, acá da para vivir. Yo vivo de mi trabajo en Balthvs desde hace poco mas de un año. Pero allá es muy poco dinero, la vida es 4-5 veces más costosa… y acá tengo muy buena calidad de vida. Pero la vida da vueltas, así que no me cierro a nada. Por ahora seguimos contentos en nuestra caótica ciudad.