Por José Gandour @gandour
De vez en cuando el amor tiene buenos resultados. La historia es más o menos asi: Dos personajes de la escena musical chilena, Nicole L´Huiller y Juan Necochea, antiguos integrantes de proyectos tan llamativos como Cóndor Jet y Picnic Kibun, se enamoran y se juntan para hacer música entre los dos. A ella la aceptan en un programa de Media arts & sciences en la prestigiosa universidad de MIT y sin dudarlo Juan decide acompañarla, teniendo además como objetivo darle forma a su nueva propuesta musical llamada Breaking Forms. Desde entonces, a pesar de ser un par de desconocidos en territorio adverso, han publicado dos Eps de fina factura llamados simplemente Uno y Dos, muestras exquisitas de pop electrónico de raíces new wave que impresionan en su elegante construcción y su tierna rebeldía. No se confundan: Aquí no hay cursileria edulcorada ni excesos de algodón de azúcar. Este es el buen sabor del pop contemporáneo en su esencia más favorable. Esto es Breaking forms en formato entrevista:
¿De qué se trata Breaking forms?
Juan: Breaking Forms es una expresión de amor de entre Nicole y yo. Es un espacio de juego donde colaboramos en crear arte juntos. Lo usamos también para narrar nuestras aventuras e historias cotidianas.
¿A qué suena el proyecto?
Juan: El sonido de Breaking Forms es una mezcla de sintes, guitarras, amor, espacio y galaxias arpegiadas.
¿El proyecto nace a partir de la relación entre los dos o mas bien (poniéndonos un poco cursis) Breaking Forms ayudó, después de su formación, a consolidarlos como pareja?
Nicole: Ha sido muy bonito encontrarnos en la música, como un lugar de cocreación y dialogo. El proyecto nació despues de estar juntos.
¿Es el proyecto lo que los hace trasladarse de Chile Estados Unidos?
Nicole: No, nos vinimos a Estados unidos porque me vine a estudiar un magister. Justo cuando nos vinimos hicimos nuestro primer lanzamiento y empezamos a tocar por acá
¿Qué cambios han notado entre sus experiencias musicales en Chile y lo que están viviendo en Boston?
Nicole: Hemos vivido varios cambios y son escenarios bastante distintos. Una vez que llegamos a Boston, fue todo un trabajo (y sigue siendo) conectar con la escena local y conocer otros músicos. En cambio en Santiago ya teníamos más armado esto como algo cotidiano. Ha sido interesante este desafío de entender un contexto completamente distinto y lograr armar algo por acá también.
¿La gente que los ha visto en Estados Unidos los ve como bichos raros que vienen del fin el mundo o el exotismo no llega hasta ese punto?
Juan: Hahaha… la verdad es que no.
¿Cómo es la experiencia en vivo de Breaking Forms? ¿Qué papel cumple cada uno en tarima?
Juan: Somos dos arriba del escenario. Nicole canta el 98% de todo y mueve bases, sintes y sus loops; yo toco guitarra y administro mis loops de guitarra (a veces canto, pero poco).
¿Cómo se ve desde Boston la escena musical chilena?
Juan: La escena musical chilena se para bien sola. Ha sido interesante ver acá en Boston como hay mucho virtuoso y talentoso músico tocando la misma música de siempre. Creo que en Chile se ha dado que hay una escena musical muy creativa, que tiene voz propia. A nivel local, en Boston, no hemos podido encontrar una voz tan clara. Quizás nos falte tiempo, quién sabe.
Nicole: Hemos estado bien conectados con nuestros amigos de Chile y vemos como siguen creciendo y creando. También hemos estado cerca de amigos que viven fuera de Chile. Nuestra primera tocata en Boston fue junto a Francisca Valenzuela por ejemplo. Fue muy bacan.
Después de presentar en dos años estos Eps, ¿qué se viene en el futuro para ustedes?
Nicole: Tenemos planeado lanzar un nuevo ep en diciembre y otro a principio del 2018. Entre medio también unos videos y seguimos trabajando en música nueva. La idea es estar constantemente sacando material y explorando cosas nuevas.
Por último, ¿cambia la forma de hacer música fuera de Chile?
Juan: Creo que siempre el contexto en el que uno se envuelve se traspasa a lo que uno crea como arte. Boston es muy diferente a Santiago, en todo. Para mi, ha sido una experencia diferente al componer y al conversar con la musica.
Nicole: Tambien hemos aprendido muchas cosas y eso siempre alimenta nuestros procesos creativos.