Por equipo de Zonagirante.com @zonagirante
Arte portada Zonagirante Estudio
Aquí van más lecciones para los músicos independientes, que a veces se pierden en las ramas, y no saben que sus canciones valen y que hay que protegerlas. Este es un buen día para saber qué son los derechos editoriales de la música.
Los derechos editoriales de la música, también conocidos como derechos de publicación o derechos de autor editoriales, se refieren a los derechos legales que poseen los creadores (compositores y letristas) o los editores de una obra musical sobre el uso, distribución y explotación comercial de dicha obra.
Estos derechos abarcan varios aspectos clave:
-Derecho de reproducción: Permite controlar la producción de copias de la obra en distintos formatos (CDs, vinilos, descargas digitales, streaming, etc.).
-Derecho de distribución: Autoriza la venta o difusión de la obra en el mercado.
-Derecho de ejecución pública: Se refiere al derecho de recibir regalías cuando la obra se interpreta en conciertos, radios, televisión, plataformas de streaming o lugares públicos.
-Derecho de sincronización: Aplica cuando la música se usa en combinación con imágenes, como en películas, anuncios o videojuegos.
-Derecho de adaptación: Protege contra la creación de versiones derivadas o arreglos sin permiso.
¿Quién administra estos derechos?
Editoriales musicales (Music Publishers): Empresas que gestionan los derechos editoriales en nombre de los compositores, buscando oportunidades comerciales y recaudando regalías.
Sociedades de gestión colectiva: Organizaciones como ASCAP, BMI o SACM que recaudan y distribuyen regalías por ejecución pública.
¿Cuál es la diferencia con los derechos fonográficos?
Los derechos editoriales protegen la composición (melodía y letra), mientras que los derechos fonográficos protegen la grabación específica de esa composición (interpretada por un artista o banda en particular).
Si estás creando música o ilustrando proyectos relacionados con la industria, es clave entender cómo estos derechos pueden afectar la comercialización y uso de tu trabajo.
En fin…. Zonagirante.com (ya ustedes lo saben, se los hemos dicho muchas veces) está vinculado a Groover, una empresa digital con sede en Francia, que ofrece a los nuevos artistas la posibilidad de mostrar sus más recientes tonadas, a cambio de un pequeño pago, a diversos profesionales vinculados al negocio alrededor del mundo. Entre los nombres disponibles hay directores de emisoras, periodistas especializados, bookers, y otros participantes de este sector económico, gente de todos los continentes. En todo este tiempo hemos recibido miles de canciones para reseñar, procedentes mayoritariamente de Europa, Estados Unidos y Canadá, pero también hemos oído material que viene de, entre otras naciones, Trinidad y Tobago, Zimbabwe, Zambia, Japón, Marruecos, Congo, Corea del Sur, Brasil, Camerún, México, Hong Kong y hasta de Islas Mauricio e Islas Reunión. La experiencia ha sido crecientemente maravillosa. Esto nos ayuda a mantener nuestro amor a la autogestión musical, venga de donde venga. Es la bandera que siempre defenderemos.
En la presente actualización nos hemos llenado de agradables sorpresas. En primera instancia traemos como novedad la música de Slave to sin, un proyecto que se autodefine como «una banda industrial conformado unicamente por una mujer». También tenemos a Tiana, artista alemana, quien, después de unos años de descanso, ha regresado a la escena músical, presentando su renovada propuesta de música electrónica. Por último, nos alegra tener entre nosotros a Logan Garrett, dj y productor residente en Nashville, quien contradice ese principio en el cual se define esta ciudad como espacio exclusivo del country music.
En fin, 40 nuevas canciones, lo mejor que recibimos todos los días a través de Groover. La independencia está de nuestro lado, nosotros estamos abrazados a ella. Hay mucho que escuchar y conocer, hay que aprovechar estos tiempos de comunicación global para alimentar los oídos con el mejor sonido. Ese es nuestro camino.