Por Carla Vera
La agrupación ecuatoriana Morfeo es una banda que experimenta. Que recorre terrenos musicales nuevos. Se pierde en ellos y se redescubre a través de nuevas composiciones. La banda pasó de lo acústico con rasgos folk en su primer disco Morfeo y el Misterio de la Unión al rock and roll en su EP Morfeo. Ahora regresan recargados, electrónicos y viscerales en RA, un álbum que es un viaje sonoro lleno de emociones adornadas con sintetizadores y espirales melódicas. El tema Más es el primer sencillo del disco. “Pariste el tiempo cuando me pedías más y más” dice uno de los versos. El video fue realizado en Alemania por Teleskop Music Produktion.
El disco fue grabado durante un año y medio en Ermitaño Records (Guayaquil) entre jams e improvisaciones. La banda quiso cambiar los inicios de Morfeo en los que Carlos Bohorquez, fundador de la banda, componía y escribía las letras de las canciones. En Ra, la dinámica fue de componer en conjunto, una relación de banda mucho más cercana.
El álbum está conformado por nueve canciones en las que el sonido se fue hacia lo electrónico. “Es como el negativo del primer disco – dice Carlos Bohorquez-. Este es igual sentimental, pero tiende hacia la oscuridad”. Amor, desamor, desencuentros y rupturas son los sentimientos que se encuentran en él. También se habla de la profundidad: del arte, de la música, del ser… El disco fue una catarsis colectiva entre los miembros de Morfeo.
Descenso es la canción que abre Ra. Es como un salto en caída libre que sucede en cámara lenta y va formando una espiral. El álbum arranca suave, tranquilo, con matices de luz y se pinta –poco a poco- de tonalidades más oscuras. Con Abismo culmina la exploración, el viaje experimental hacia las profundidades. En Ra, Morfeo alcanzó un fondo sonoro inexplicable y completamente nuevo para ellos.
Nota del editor: Este artículo fue publicado originalmente en Planarteria.com, página ecuatoriana amiga y hermana de nuestro proyecto. Ellos gentílmente nos permitieron la reproducción de esta nota.